MEDIACIÓ I CONVIVÈNCIA A L' IES LA GUINEUETA. ESPAI EDUCATIU PER COMPARTIR EXPERIÈNCIES, REFLEXIONS I BONES PRÀCTIQUES.

21 de desembre, 2008

"Violència de baixa intensitat amb resultat de mort". Article de Maricel Chavarria sobre la violència de gènere


Article sobre la Violència de gènere: " Violencia de baja intensidad con resultado de muerte. La dimensión desconocida del maltrato machista de MARICEL CHAVARRÍA
aparegut a la Vanguardia el 10-12-2008
El año acabará con más de 60 mujeres asesinadas, ¿pero con cuántas autoestimas destrozadas?

No se llega a la violencia extrema si no existen violencias de baja intensidad; de lo contrario, las más de 60 víctimas por violencia sexista con las que se va a cerrar este 2008 - cifra demasiado similar al nefasto balance del año anterior, que fue de 71 fallecidas-serían una excepción, simples hechos aislados en las páginas de sucesos. Muy al contrario: hoy sabemos que la violencia machista es un hecho estructural que deriva de un contexto de dominio del hombre. Y que, si bien sólo es visible cuando es extrema, también se expresa en sus formas intermedias y baja intensidad; violencias a veces imperceptibles tanto para quien las practica como para quien las recibe, y que no por sutiles dejan de atentar contra los derechos humanos, de los que hoy se celebra el día internacional.

Paternalismos perversos.

Según los estudios de género, la tolerancia y el desconocimiento respecto a los comportamientos abusivos de muchos hombres son aún enormes. La manera en que han sido socializados como varones los convierte en expertos en garantizar el control sobre la mujer y perpetuar la distribución injusta de derechos y oportunidades. No importa que no medie mala voluntad. Son dispositivos incorporados en el proceso de hacerse hombres,por medio de los cuales se disminuye a las mujeres con comentarios paternalistas, se las corrige en público, se las abandonadas en el cuidado de personas dependientes, se las obliga a tomar decisiones según la agenda laboral de la pareja en lugar de la suya propia... ¿Cuántas carreras profesionales habrán quedado truncadas este 2008? ¿Cuántas autoestimas destrozadas?

¿Cómo? ¿Jugar con las niñas?

"El principal escollo radica en no ser consciente del problema", apunta el experto forense Miguel Lorente, en la actualidad, delegado del Gobierno para la Violencia de Género. "Porque si hablamos de micromachismos, como los llama

Luis Bonino [ psiquiatra experto en relaciones de género], ese es un comportamiento que se aprende en la escuela, se vive en casa, está en el ambiente. La ley integral contra la Violencia de Género aspira a cambiar la referencia, porque es la que da lugar a esa construcción del espacio en la que el agresor puede perpetrar un grado de control y violencia".

Lorente observa con preocupación la diferenciación que se hace entre sexos en la infancia. "Ves que los niños ocupan el centro del patio del colegio, mientras que ellas están en un rincón. ´¿Jugar con las niñas? Qué me dices, hasta ahí podíamos llegar´. Son dos mundos separados que se encuentran ya en la adolescencia, donde los roles están muy marcados. Ahí comienzan los empujones, el tirar las carpetas a las niñas al suelo..., es parte de la dinámica, una especie de baile nupcial con el componente agresivo y hostil muy presente en los chicos como reclamo de atención".

El triunfo de los gallitos.

Las encuestas sobre convivencia escolar indican que no sólo no hay un rechazo hacia este tipo de conductas, sino que casi un 16% de los niños y las niñas las consideran positivas. "La figura del gallito es la más valorada, el chico más guai es el malo. Es esa forma de rebajar el nivel de exigencia de los hombres", apunta Lorente. "Han entrado en una dinámica en la que buscan la satisfacción por medio del reconocimiento, lo que sólo genera frustración".

Presas de un malestar difuso.

Luis Bonino alerta sobre el malestar y daño psíquico que provocan en la mujer las microviolencias. Que un hombre no participe en lo doméstico, que se aproveche de la capacidad femenina de cuidar, que culpabilice y se justifique, que evite la intimidad y la reciprocidad, imponiendo incluso silencios, tiene sus consecuencias. La primera, un deterioro de la autoestima; también malestar inespecífico, incapacidad de reacción, inhibición de la lucidez, impotencia, fatiga, sentimiento de estar atrapadas, irritabilidad crónica, actitud defensiva..., de todo lo cual la mujer tiende a culparse.

Maltrato encubierto.

"Que haya consecuencias es la prueba de que existe ese maltrato", señala Esperança Bosch, profesora de Psicología de la Universitat de les Illes Balears y autora de La voz de las invisibles."Puede ser más coercitivo o más encubierto - añade-,o darse en situaciones de crisis, como es el caso del boicot a una pareja a la que han ofrecido un cargo importante y tras prometerle te apoyaré en todo,se la boicotea con un lo siento, hoy no podré ir a buscar a los niños".

Contratemos una cuidadora.

La antropóloga Dolors Comas, catedrática de la Universitat Rovira i Virgili, advierte cómo esa construcción cultural de géneros, asumida por las mujeres, las lleva a sentirse culpables si no cumplen su papel. "Se naturaliza, por ejemplo, que tienen una capacidad innata para el cuidado que nadie discute. ¿Es un caso de violencia que las hijas y las nueras cuiden a sus mayores antes que los hijos? No en sí mismo, pero sí en la medida en que la sociedad jerarquiza los roles y valora a las personas en función de estos, estableciendo relaciones de desigualdad. El análisis racional es difícil, pues el tema está impregnado de emociones y dimensiones morales. Al final, se resuelve contratando una señora de hacer faenas y a una inmigrante que cuide de la madre. Pagar antes que enfrentarse".
Gràcies al recull de premsa de Paula